“Necesitamos energía estable y a precios competitivos”

Maria Mas – Directora Gerente de la AEQT

Dani Revenga / Tarragona

Históricamente, la electricidad ha sido uno de los grandes temas del sector químico, por sus precios poco competitivos y, también, por la necesidad de contar con redes fiables. Mucho más ante el reto de la descarbonización. Repasamos con la Directora Gerente de la Asociación de Empresas Químicas de Tarragona los ejes en los que trabaja el clúster.

Uno de los caballos de batalla del sector químico es la electricidad. ¿Qué lecciones hay que extraer del reciente apagón?

El sector necesita energía estable. Y lo que ha pasado lo pone en entredicho. En los últimos años hemos venido reclamando mejoras en las redes, especialmente porque tenemos el reto de la descarbonización, que supone más consumo de electricidad. Es fundamental que tengamos un suministro con todas las garantías, y este incidente nos ha preocupado.

Además de las redes, el apagón crea dudas sobre la generación...

En efecto. Vamos a multiplicar nuestro consumo, hay poca potencia disponible y otro tema es que sea de origen renovable, siempre se puede recurrir a los PPA y si se apagan las nucleares el escenario será peor. Además, está la cuestión de los puntos de conexión, porque para arrancar una planta descarbonizada necesitas conectar unidades nuevas, y si no tienes la capacidad de conexión dentro de tus instalaciones vas a tener un problema.

Y todavía no hemos hablado del precio, que ha sido la gran denuncia de los últimos años del sector por su impacto negativo en la competitividad. ¿Hemos avanzado?

La patronal química española, Feique, se reunió hace poco con el Ministerio para suprimir los peajes e introducir algunos retoques adicionales. Pero todavía no se han materializado estos avances. Por otro lado, se sigue estudiando la aplicación de las redes cerradas, que supondrían un ahorro importante. Esperamos que todo esto pueda ser una realidad en breve. El sector químico necesita energía a precios competitivos, si no es así el sector está amenazado.

¿Qué impacto tuvo el apagón del 28 de abril?

Las empresas todavía lo están analizando, pero sin ninguna duda ha sido millonario.

Otra reclamación histórica de las empresas químicas es una relación más ágil con la Administración...

Necesitamos una Administracion ágil, rápida, sencilla, clara, segura... Las inversiones requieren seguridad jurídica, marcos regulatorios estables. Las reglas del juego no pueden cambiar mientras se desarrolla una determinada apuesta empresarial. Para conseguirlo, hay que consolidar una política industrial que esté al margen de los cambios políticos. El caso de la energía es el más claro, pero hay más temas.

Como las infraestructuras...

Efectivamente. Llevamos muchos años esperando el Corredor Mediterráneo todavía no tenemos un calendario claro de cuándo vamos a disponer de una salida ferroviaria en ancho de vía internacional hacia Europa. Y esta situación no ayuda a las plantas que ya tenemos y frena posibles inversiones. Además, va en contra de la descarbonización, porque una de las claves de este proceso es que nuestros productos cada vez más se transporten por tren y no por carretera.

Se suele decir que las normativas europeas son para la industria una desventaja competitiva con otras zonas del mundo. ¿Las de aquí todavía lo son más?

En Catalunya pasa justamente eso de manera muy especial y nos penaliza de manera diferencial. Exigimos más y antes que el resto de agentes normativos en el desarrollo de estas normativas, de manera que nos dificulta todavía más competir con plantas químicas del resto de la Unión Europea y no digamos de otras zonas del mundo como el continente asiático.

Feique pide un fondo para financiar la descarbonización...

Nos parece una buena idea, aunque puede tener otras formulaciones. El hecho de fondo que hay que afrontar es que las inversiones para descarbonizarnos no son rentables. Se tienen que hacer para reducir las emisiones de CO2, pero serán necesarias ayudas, que consideramos que deberían ser de un 30%. Sin estas subvenciones y unos plazos coherentes, este proceso no se llevará a término. Y eso es una amenaza para la continuidad del sector.